No es un secreto que el sector empresarial es dinámico y en gran medida, agresivo, por lo que es importante aprender a moverse como un maestro. Para ello, es necesario aprender a tomar decisiones estratégicas; elegir en base a un método de razonamiento que te acerque más a tus objetivos.
En esta oportunidad hablaremos de lo que implica tomar estas decisiones, y cuáles son los pasos necesarios para que resulte en un éxito.
¿Qué son las decisiones estratégicas y por qué afectan el desarrollo empresarial?
Las decisiones estratégicas son elecciones fundamentales que determinan el curso a largo plazo de una empresa. A diferencia de las decisiones tácticas, que son ajustes a corto plazo, las estratégicas establecen la dirección y el carácter de una organización por años o incluso décadas.
Son detonantes que transforman a grandes rasgos la actividad empresarial; esto se puede evidenciar en la penetración de un nuevo mercado, innovación de producto, o hasta el planteamiento de objetivos más ambiciosos a largo plazo.
Un claro ejemplo sería el casi de Netflix, quien estratégicamente apostó por sustituir el DVD y Blu-Ray por Streaming. Esto representaba un gran riesgo puesto a que podría desbaratarse su propio mercado, pero a largo plazo se convirtió en líder de una nueva industria.
Para finales de 2023, la plataforma ya contaba con más de 260 millones de suscriptores. Sin duda, es una decisión basada en una estrategia disruptiva que le dio la victoria al gigante del streaming.
5 pasos para tomar decisiones estratégicas
Ahora, entendiendo la importancia de incorporar la estructura estratégica para las decisiones importantes de la empresa, es momento de identificar las fases que sustentan la decisión.
Para tomar una decisión estratégica, debes considerar las siguientes fases.
1 – Identificar la situación
Lo primero es apreciar la situación desde todas sus caras. Una comprensión clara te permite desarrollar rutas para la estrategia, pero una visión escueta del asunto a tratar te puede llevar a decisiones poco eficientes.
Para lograr la excelencia puedes apoyarte en técnicas como el análisis de brechas y el Design Thinking.
2 – Recopilar datos
En segundo lugar, pasamos a recopilar todos los datos relacionados a la situación real. Idealmente, el enfoque debe ser tanto cuantitativo como cualitativo y ha de orientarse a crear una estructura de datos sólida que permita concretar información.
3 – Desarrollar alternativas
Con toda la información estructurada, el siguiente paso es generar ideas. Gracias a técnicas como la tormenta de ideas, serás capaz de tener un portafolio de posibles alternativas.
Lo importante en este punto es anular los límites convencionales y de esta manera podemos llegar a ideas más disruptivas. Aunque no significa que todas serán aprobadas, la generación masiva de ideas permite encontrar soluciones audaces.
4 – Destacar y seleccionar la más favorable
Una vez que tienes suficiente materia prima creativa, debes elegir. Para ello, lo ideal es utilizar un método objetivo, como la matriz de Eisenhower que es capaz de contrastar lo urgente y lo importante.
Con esta y otras técnicas de selección, separas todo lo que puede ser secundario y te quedas con la solución ideal.
5 – Implementar y monitorear
Finalmente, implementas las decisiones estratégicas en conjunto con un programa de monitoreo periódico. Considerando que se trata de una decisión para largos períodos, es importante mantener un programa de control sobre los procedimientos; así te aseguras de que la empresa va por el curso que le conviene.
